Pollo a l’ast 8


Para volver a San Juan desde el epicentro de la fiesta se utilizaban dos corredores principales: por el norte abandonando lo viejo por Antoniutti, y por el sur evacuando por la Vuelta del Castillo. Habia otras opciones, pero estaban reservadas a los amantes de las emociones fuertes: Vistabella y Ciudadela.

Un amigo de un amigo mio volvia siempre con sus amigos, y por lo tanto nunca con sus amigas, por las vias estandar. Se batian en cobarde retirada unas veces de noche, otras de dia, caminando como walking deaths, con ese aspecto enfermizo y blanquecino, y esa mirada que parece que no enfoca bien, aunque todos sabemos que cuando las cosas ahi afuera estan borrosas, da igual como las enfoques…

Por cualquiera de esas dos vias de escape, siempre quedaban las ultimas tentaciones. Unas atacando al ludopata que todos llevamos dentro, y otras invitando a reponer materia solida en el estomago, ahogado por las emociones vividas.

La mayoria de las veces ceder ante esas tentaciones era sencillamente imposible. El bolsillo se habia ido vaciando al mismo ritmo que se llenaba el higado. Y si quedaba algo de morralla, era obligado intentar sacar el peluche mas feo con las pinzas que no podian sacar peluches.

Esos regresos tenian su parte de reto. Habia que tener agallas para pasar junto a los restoranes de quita y pon sin sufrir el vaiven del magma estomacal subiendo y bajando por el esofago. Era lo ultimo que el cuerpo te podia pedir, sentarse en una de esas mesas a beber sangria de color negruzco, a comerse un plato de paella amarilla fosforito, o a masticar ese vinarro entre azulado y violaceo mientras apartabas a manotazos las polillas.

Pero un dia -la carne es debil- se sentaron y pidieron un pollo a l’ast…. ¡¡¡¡Y ESTABA COJONUDOOOOOOOOOOOO!!!!


8 ideas sobre “Pollo a l’ast

  • Unai

    En San Fermin a determinadas horas te puedes comer 3 kebabs seguidos, el resto del año ni poder olerlos oye…
    Por no hablar de los puestos de salchichas, txistorras, etc… en mitad de jarauta.

  • gaupaseitor

    Hace años, también acabé comiendo, más bien desayunando, un pollo en Antoniutti. Lo recuerdo porque era más amarillo que Piolín.

  • pamplonudo

    Yo ni recuerdo las veces que he pasado por Antoniutti de vuelta al sobre, y nunca me he sentado a jalar . Unas veces porque el dinero de mi bolsillo no era suficiente para hacer frente a tan «exquisito» manjar, y otras, la mayoría, porque aun en estado semiconsciente nunca me ha gustado que me roben. A pesar de esto diré que sí que me han dicho que los pollos están cojonudos.

  • Mc Garrich

    Numerosos medios pollos me he comido yo con mis amigos, eso sí, estaban realmente buenos, aunque a esas horas el paladar admite cualquier cosa, otra cosa es lo que diga el estomago al día siguiente.

  • Kalandrakas

    Pues la verdad, ahora porque han bajado la calidad, pero aun recuerdo ese glorioso dia en qué, marchando en retirada toda mi cuadrilla se dirigía hacia antoniuti a por unos buñuelos(si, son de buñuelos no de churros, que se le va a hacer) llego hasta mi pituitaria un aroma delicioso, y siguiendo mi olfato llegue a las casas regionales, donde me esperaba un hermoso plato de cocido montañes con todos sus sacramentos!Lo bueno que estaba, y ver la cara de mi cuadrilla al verme aparecer con un cocido…

  • Toko-Toko

    Pues yo me quedo con el año en que acabamos comiendonos un pollo en Antoniuti y debajo del escenario, mientras llovía como si no costara nada, y evidentemente el baile se había suspendido….., me supo glorioso, y lo que sea con tal de no ir a casa, jejejejeje.

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