Según la definición de «doblador» del Diccionario Espasa de Términos Taurinos:
Se dice del profesional que no interviene en la lidia. Su labor, encuadrada hoy en día en los encierros, dentro de la plaza de toros se limita a cambiar la embestida de los toros utilizando el capote a una mano, bien para evitar una cogida o para hacerles entrar en los toriles.
Ya a finales de los años 20 del siglo pasado iba aumentando el número de mozos que poblaban el ruedo justo al final del encierro y el 8 de julio de 1927 fue corneado mortalmente Santiago Martínez Zufía junto a uno de los burladeros de la plaza de toros. Para aportar mayor seguridad se decidió por parte de los organizadores incorporar banderilleros que trataran de controlar a los toros y conducirlos lo más rápidamente posible a los corrales. Cuanto menos tiempo estén los toros sueltos, menor es el riesgo.
Los dobladores cuentan de entrada con un handicap y es que no pueden realizar los movimientos típicos del toreo ya que los toros no pueden tener contacto con el capote, puesto que «estropearían» al toro para la posterior lidia de la tarde y únicamente pueden utilizarlo a una mano, por lo que en caso de apuro, no les queda otra que soltarlo y correr hacia el vallado protector.
Pero si ya es difícil conducir a un toro con el capote a una mano sin poder perderlo de vista, hay que añadir las situaciones comprometidas que deben sortear y que les exigen tener visión perférica 360º para sortear las situaciones provocadas por las personas (me niego a llamarlos corredores) que no siguen la normativa del encierro. Porque existe una normativa del encierro que indica, entre otras cosas:
5.5. Todas las personas participantes en la carrera, al llegar a la Plaza de Toros, deberán colocarse cuanto antes en el interior del vallado, a fin de que este quede libre para refugio de los demás.
Y entre las prohibiciones:
5.21. Correr hacia las reses o detrás de ellas.
5.22. Citar a las reses o llamar su atención, de cualquier forma y por cualquier motivo, en el itinerario o en el ruedo de la Plaza, y especialmente agarrar las astas de las reses y abrazar el lomo de los toros.
A continuación os dejo un par de videos en los que se aprecia a lo que se enfrentan cada mañana.
En este primer video, los dobladores cumplen con solvencia, no exenta de riesgo, su cometido (10 de julio de 2010)
httpv://www.youtube.com/watch?v=z3uFly3UtdE
En este, aunque la calidad de imagen es mala, se aprecia de cerca un momento de peligro con los Vitorinos en 2007
httpv://www.youtube.com/watch?v=YeI8uFS8EYU
Si sabéis de algún video donde se aprecie la labor de estos especialistas, podéis publicarlos en los comentarios.
Yo los suprimiría. No nos dejan lucirnos a los buenos corredores que no nos gusta abrirnos en abanico.
!!! POR FAVOR !!!!! Dejen trabajar a los dobladores !!!! No somos conscientes del riesgo que realmente corren .
Cierto, en el 87, ya hubo un accidente grave del doblador Ciriaco, que quedó paralítico.
Estafetakoa incendario!!
En tiempos de crisis……, igual algún «iluminado/a» los suprime……., puestos ya a ver cosas ineditas……..
Pero si lo que queremos es emoción, riesgo, lucimiento de los corredores, ¿qué pintan los dobladores? ¿Y los pastores?
Totalmente de acuerdo con Estafetakoa.
Lo único que dejaría es los mansos. Nada de pastores ni de dobladores.
Veríais que rápido quedaban sólo corredores, sin gañanes.
Eso ,eso por las bravas. Solucionemos el encierro a base de sangre…