Caldico 3


En una olla con agua hirviendo, añádase una cebolla, puerro, un par de zanahorias peladas, sal al gusto y unos tacos grandes de jamón, txungur, que decimos por aquí. También puede ponerse un trozo de chorizo, preferiblemente picante.

Tápese la olla y déjese a fuego lento, durante una hora aproximadamente. A continuación, retírense los ingredientes y, si se desea dar fundamento al caldo, puede añadirse un puñado de fideos, que deberán cocerse avivando el fuego durante unos quince minutos e, incluso, puede enriquecerse con un huevo duro bien picado.

Como hemos hecho propósitos de año nuevo, prescindiremos del chorrico de jerez.

A partir de aquí, dos opciones.

Una, vestirse de persona, ir a trabajar quien pueda y languidecer en medio de la rutina mientras se ve pasar los meses desde la ventana.

O dos, tomarse un zumo de tomate, con unas gotitas de vodka, vestirse de blanco, atarse el pañuelo rojo al cuello y plantarse en la puerta del Pirineo, un martini en una mano y una croqueta en la otra, a esperar a que pasen los gigantes.

Ya falta menos.


3 ideas sobre “Caldico

  • sanferman

    El caldico, ese gran regenerador.
    Lo único pediría que no te escaldes los dedos mientras sostienes el vasoplástico.
    Éste es un buen tema para un post. Los escorzos de la peña mientras sujeta los vasos de caldo por el reborde superior.
    Ni que decir tiene que siempre llega el desgraciao de turno con el clásico empujón y bla, bla, bla…

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